Rancho Naturalista
El propósito de Rancho Naturalista es brindar un gran espacio a los ambiciosos observadores de aves. En los alrededores de la propiedad es posible observar más de 450 especies de aves en su hábitat natural, incluida una increíble variedad de colibríes.
- 2:00 p.m. check in
- 12:00 p.m. check out
- Free Breakfast
Numerosas especies que habitan en la Cordillera deTalamanca son increíblemente particulares y casi nunca son vistas fuera de Costa Rica. En el balcón del Rancho Naturalista tenemos algunos comederos para los colibríes. Hay una variedad excelente áreas de observación a poca distancia del complejo, donde se pueden buscar sunbitterns y tangaras. Visite el Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (CATIE) para ver aves acuáticas como ibis verdes y gallinules púrpuras. Para los aventureros experimentados, hay algunas formas más extremas de entretenimiento en las cercanías como: actividades de canyoning y rafting en el río Pacuare, que cuenta con rápidos Clase III y Clase IV.
El albergue principal cuenta con varias habitaciones que comparten un balcón y una sala de estar común con Wi-Fi. Los huéspedes también pueden optar por alojarse en pequeñas cabañas cerca del albergue principal o reservar una habitación en la "casita rustica" con su propia sala de estar y cocina. La mayoría de las habitaciones tienen servicio de limpieza diario y lavandería; además, poseen vistas ideales para la observación de aves.
Todas las comidas están incluidas en su estadía. El personal de cocina del Rancho Naturalista prepara una amplia variedad de platillos costarricenses e internacionales. Servidos al estilo familiar, con generosas fuentes en cada mesa del comedor. Cada comida es preparada con ingredientes locales acompañada de refrescante jugo de frutas, café y té. Su estadía también incluye acceso a los senderos privados del hotel.
This mid-elevation lodge offers a lot for nature lovers. We were the only guests, which was a little strange, but also really nice because we stayed in the nicest room, and received undivided service from Vid, Lisa and their capable staff. The room was spacious, the bathroom deluxe. They attract birds and animals to an area viewable from the balcony and the dining room, and the 56 hectare property has a network of trails where our guide for the day, Herman Veregas (and his wife, Jenny), showed us many birds (including the snow-capped hummingbird) and orchids. We only spent two nights, but saw a lot of wildlife, and enjoyed the meals and wines.
We LOVED this hotel!
